viernes, 23 de noviembre de 2007

Soy un triste idealista


Soy un idealista
Soy un idealista total, todo lo imagino, todo lo quiero, todo lo deseo, y nada tengo. Por eso es que idealizo todo, porque nada tengo, nada poseo. Quisiera tener muchas cosas, quisiera tener al mundo, ¿será eso posible?, ¿será posible ser libre como el viento que todo lo recorre y todo lo tiene?. Así quiero sentirme, libre, completamente, para así poder poseer el mundo; pero eso es imposible para mí, para mí todo es imposible, desde tener un padre hasta tener amigos. Qué triste es estar solo, los que estamos solos idealizamos todo, soñamos con que al día siguiente todo va a ser diferente como por arte de magia, soñamos con que todo va a cambiar lentamente o rápidamente, pero que va a cambiar. Sin embargo nada evoluciona, todo sigue igual, ¿por qué?, nos hacemos varias prguntas, sobre la causa de por qué no tenemos lo que soñamos, y volvemos a idealizarlo todo, a soñar que todo es como uno quiere, pero parece que el mundo se ha empeñado con nosotros, para seguir solos, tristes, queriendo tenerlo todo pero sin conseguir nada. Cada noche vuelvo a idealizar, y cada mañana vuelvo a decepcionarme, yo quiero ser otro, quiero que las cosas cambien; yo sí puedo hacerlo, pero no me dejan, me tienen esposada el alma, sujetada con cadenas, es triste no tener lo que sueñas por culpa de tus propios "padres", aquellos ángeles que Dios nos puso, pero en mi caso son los demonios que la naturaleza insabia me colocó, y no sé por qué, me pregunto y no logro respuesta. Entonces, los idealistas ¿de qué viviremos?, de los sueños o de la realidad, si uno vive de los sueños es siquiera un remedio, pero si se vive de la realidad, es como estar muerto en vida, ya ni sé que más pensar, que más hacer, que más soñar, si nada de lo que idealizo se realiza, y no por mi culpa, sino por otros. ¿Quién me puede responder? ¿Quién me puede ayudar? No lo sé, nunca lo sabré, es un secreto que el destino me guarda, y que no lo quiere liberar. Que tristeza es el mundo de tu realidad, pero que martirizante es el mundo de los sueños. Es un gran dilema, dos caras que se oponen, y no creo econtrar equilibrio entre ambas. Tal vez el equilibrio no exista, sino solo la vida y la muerte :-( ¿que será lo que me esperará a mí?, la vida o la muerte, los sueños que nunca van a hacer o la realidad que sí es y que me destruye completamente el alma. Ya ni Dios me puede ayudar, porque él está en la realidad y en el idealismo, tal vez él sea el equilibrio, pero yo no soy DIOS, yo soy un idealista. .......... :-(